Atendidos en primer término por la ambulancia del servicio de urgencias en el propio lugar del siniestro, y reconocido más tarde en el Hospital (eso sí, una vez ya cenado –vayan las cosas por delante-), la hoja del expediente médico rezaba algo como esto:
“Amnesis y exploración:
Acude refiriendo dolor en cuello por accidente de tráfico de horas de evolución. Al examen médico paciente consciente, orientado, colaborador, examen neurológico normal”
Manda güevos: ¿… consciente, ...orientado, …normal?... Debe ser que la exploración practicada no es completa, no tienen ni P*** idea.
Sigue el Juicio diagnóstico y concluye: “Latigazo Cervical”. Ja, ja, latigazo (sin palabras, no voy a hacer mayor comentario).
Y Añade: “Tratamiento: Myolastan, Enantyum, Nolotil, Inmovilización relativa con collarín y seguimiento por especialista”
… “Chupao” lo tengo entonces!!!, aunque desde luego NO todos los reveses de esta nuestra experiencia vital, y su vacuna, van a ser iguales.
Este ha sido un percance baladí comparado con las hostias ¿enriquecedoras?, con que últimamente la vida me zarandea; en esta ocasión diez días en total de tratamiento, que con método, sistema y constancia, resolverán sin mayor cuestión hasta dejarme sanísimo como un bebé.
¡Ojalá todos los males se curaran así!
En una entrada anterior del blog ya hice referencia a la genialísima película “Crash” (2005) desarrollada en base a accidentes, casualidades, y la existencia de personas ajenas entre sí que orquestan una misma historia. Hoy viene al pelo recordar una preciosísima canción de Bird York que aparece en la banda sonora de la película, que conjuga armonía vocal con una magnífica melodía. Se titula "In the deep", una canción impecablemente bella.
(...)
Pensé que tenías todas las respuestas
para dejar mi corazón en paz.
Pero algo sucede,
no ves que está viniendo, ahora
no puedes pararte.
Y ahora estás ahí fuera nadando,
en lo profundo…
en lo profundo.
La vida te mantiene el corazón cayendo en barrena,
hasta que te marchas,
hasta que deshaces tu orgullo y escalas al cielo,
y te quitas del medio.
Ahora estás ahí fuera girando,
…en lo profundo,
…en lo profundo,
…en lo profundo
…en lo profundo.
Ahora estás ahí fuera girando,
ahora estás ahí fuera nadando,
…en lo profundo,
…en lo profundo,
…en lo profundo
…en lo profundo.
....................
El atestado de la Policía Local está redactado en la modalidad de “Accidente CON victimas”, donde la preposición “CON” es optativa a juicio de la interpretación del agente. Es curioso, cualquier incidente tiene “víctimas”, bien una colisión contra un autobús o bien un fortuito pinchazo de rueda, el caso es ser o no sensibles a ello y percibirlo, pues independientemente de la graduación de las consecuencias se altera la hoja de ruta… Es la Teoría del Caos, como en Crash.
"La vida es hermosa, vivirla no es una casualidad."
(Albert Einstein)
Después de embestirte un bus, lo menos es un "latigazo"
ResponderEliminarSales normal neurologicamente hablando y orientado, que mas quieres... jajajaja
No tienen ni idea, Luisa. Yo no he estado neurológicamente orientado en la vida.
ResponderEliminar:)
Un latigazo cervical no es ninguna tontería, eh.
ResponderEliminarSiempre he padecido de cervicales Marta, así que casi ni se nota.
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