No recuerdo las veces que hice sonar aquel pick up, el antiguo tocadiscos de maleta que mis padres tenían y que permitía llevarlo de aquí allá pagando un pequeño tributo, escucharlo en sonido monoaural. No sabía lo que era ni lo que me perdía y me daba igual, sólo sabía que con aquel artilugio podía trasladar la música del salón a la habitación, al piso de arriba cuando iba a la casa de campo de mis abuelos, al de abajo, de nuevo al salón, a cualquier sitio podía trasladar aquel pesado maletín gris y blanco, y hacerlo sonar enchufándolo donde hubiera electricidad.
Más chulo era el disco comodín que siempre acompañaba la pesada maleta, de duras tapas que al abrir descubrían fotografías y un largo texto incomprensible para mí. Su inconfundible portada, en profundo rojo y negro, el simbolismo de unas escaleras de emergencia con unas figuras que escenificaban, destacando en blanco, el arte de la danza con extrema sencillez. Las fotografías explicaban actos y escenas en un inglés que no entendía pero que observando con detalle adivinaba, y que aún mejor descifraba con el ritmo de aquel sonido, esa mezcla de jazz, ritmos latinos, clásica y duelos vocales, en delicioso mono.
Me encantaba como empezaba su prólogo, me trasladaba por Broadway sin conocerlo y provocaba que me moviera al ritmo de la chulería de los chasquidos de los dedos de unos Jets arrogantes haciéndose paso por la ciudad. El resto es una gran historia.
Esta semana se han cumplido 50 años de aquel mítico West Side Story, un icono del cine, los musicales, la coreografía y la danza, una grandiosa producción dirigida por Robert Wise ganadora de 10 Óscar inspirada en el célebre "Romeo y Julieta" de Shakespeare y música del gran Bernstein.
"La música puede dar nombre a lo innombrable y comunicar lo desconocido".
Leonard Bernstein (1918-1990). Compositor, pianista y director de orquesta estadounidense.
(Una escena que siempre me ha parecido de lo más chula). |
Mas que chulo! re-bueno .. ja ja ... como eran aparatosos los " I-pods " de entonces y que emocionante experimentar ese concepto tan vanguardista entonces ... gracias!!
ResponderEliminarAYer se me ocurrió una sugerencia para los temas que estás poniendo últimamente en plan desnudos y eso. El tema es "Peaches" del grupo The Stranglers. Mírate la letra si eso :)
ResponderEliminarAdoro esa película, aprendí inglés traduciendo sus letras (perdón por los gallos, cantar no es lo mío) María, maría, maríiiiiia.
ResponderEliminarBesos
que de práctico seria hoy... porque abundan aun longs plays por ahi... olvidados en su funda
ResponderEliminar· West Side Story, desde siempre, incansablemente,representado en New York. Verlo, me reconcilió con los musicales...
· Salud·os
CR & LMA
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Gran post! Por otro lado jamas me canso de disfrutar West Side Story. La he visto en NY dos veces y una vez mas en DC. Una maravilla!
ResponderEliminarbuah, que pasada de entrada, que chulada y qué recuerdos me han traido!!! Genial!!!
ResponderEliminarYa veo que a ti lo de la musica te viene de antaño.
ResponderEliminarBESOS
Yo tuve uno en tons camel, que se diría ahora, me has hecho evocar aquellos tiempos tan lejanos.
ResponderEliminar"La música puede dar nombre a lo innombrable y comunicar lo desconocido"... Más acertado imposible...
ResponderEliminarSi música, el mundo sería una garcha xD
Muackssssss!!!
Mira que casualidad, el otro día me hice con un tocadiscos antiguo, enorme xDD, si consigo encontrar un cable que se adapte...tengo curiosidad , escuchare discos que no conozco de esos que querían tirar y rescaté de un final mugriento.
ResponderEliminarLa escena me pone de los nervios, la verdad :)
Menudo recuerdo traes hoy, !era chulísimo! un tocadisco en una maleta, una chulada total jajaja.
ResponderEliminarUn beso.
Los musicales clásicos son de lo más encantadores.
ResponderEliminarGracias por la visita.
Abrazo!
chulísima tu entrada y la frase, verdad. la foto chulísima también.
ResponderEliminar¡Que lindo aparato!.. Tengo mi bandeja, pero en cualquier momento me compro un antiguo y adorable Winco.. Saludos
ResponderEliminarCómo han cambiado las cosas! (ya hay MP5, qué será eso?), pero la música sigue provocando las mismas emociones.
ResponderEliminarAún conservamos un Bettor de los años 70 que funciona y todo...!qué recuerdos amigo¡
ResponderEliminarUn placer haber pasado de nuevo por tu casa. Estupendo post.
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
Genial Sergio!!!!!
ResponderEliminarCierto, la música mueve a reir,a veces llorar y por supuesto a bailar......
ME ENCANTA
Aquellos iTrastos era todo un invento "ALTIVOLANTIS".
ResponderEliminarOdd Bu no me acordaba de esa canción y menos de la letra, sí que se ajusta, sí, claramente a la sección. Una opción más, gracias.
Pilar tampoco es lo mío, y menos con "María", que por cierto me encanta.
No hace mucho recuperé los vinilos que tenía olvidados Jo, y es un absoluto gozo volver a hacerlos sonar.
Siempre me ha gustado ñOCO Le bOLO aunque ahora ese "drama" sea más light que una película de Disney.
Yo me conformaría con ir a NY y DC aunque no la viera Luis Gomez.
ResponderEliminarGracias La pequeña Meg.
La verdad es que sí MEME, no lo voy a negar.
Tracy es modelo es ya vintage total.
La Rubia Tarada después de buscar garcha en el diccionario te diré que sí.
Luisa ¿no te gusta esa coreografía?
ResponderEliminarUn invento muy chulo San.
Igualmente eMiLiA.
No lo dudes Aldo
Que yo sepa el formato mp5 no existe Ada, excepto para el chiste... por el culo bla, bla.
Logan y Lory si no recuerdo mal aquel viejo aparato también era de esa marca.
ResponderEliminarLa música es un catalizador de los sentimientos BEGO, además de serlo en sí mismo.
Oh <3 hola ;)
ResponderEliminaresta pelicula no la he visto, pero tengo tengo que verla!
En la casa de mi abuela materna había uno así, que tiempos aquellos de cuando yo era un niño.
ResponderEliminarMe encanta esa película, los bailes, la banda sonora... chula, chula.
ResponderEliminarMarííííííaaaaaaaa, la, la, la, la, la, la, Marííííaaaaaaa
Un besazo!
En la época de los guateques estaba fuera de este país pero mi chico siempre me hablaba de ellos y de los pick ups, con una sonrisa que dejaba al descubierto una alegre añoranza que yo saboreaba con la imaginación.
ResponderEliminarBsoT.
¡Chu-lí-si-mo! :D
ResponderEliminarMuy bella evocación que se disfruta mucho. Un abrazo.
ResponderEliminarSi no te disgustan los musicales no te la pierdas, es un clásico imprescindible. Gracias por seguirme, Liz.
ResponderEliminarEl tiempo es imparable David C..
Mariona recuerdo oírte cantando la cancioncilla "dedicada".
Yo era muy pequeños entonces Vera E., mis guateques eran de ganchitos, sanwiches y Fanta.
Yo es que soy muy chulo Espérame en Siberia. :)
Gracias Alma Mateos Taborda.
La verdad es que no, me ponen nerviosa las películas donde salen matones, y aunque sea un musical...salen, encima creo que se lo cargan al final.
ResponderEliminarLuisa los macarras y chulos matones los aborrezco y en este musical se muestra la rivalidad entre bandas y el contraste social y cultural de forma bastante light. No desvelaré el final por si la ves.
ResponderEliminarFui a buscar lo que era chulo, ahora que sé, digo que sí, la meletita musical es rechulísima, y yo quero unaaa! :)
ResponderEliminarMui acertada la frase de Bernstein...vida es música.
Abzs.
Nocheluz, Bernstein sabía bien de lo que hablaba.
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